Ahora, muchas organizaciones desean aprovechar la rentabilidad, escalabilidad, seguridad y otros beneficios que ofrece la nube.
Los centros de datos son costosos, los costos de propiedad, energía, servidores, almacenamiento y redes, además del personal de operaciones, pesan sobre los resultados de una empresa.
No es de extrañar que las organizaciones vean la nube como una forma de reducir —o incluso eliminar— todos o algunos de estos gastos. Esto es especialmente importante para las organizaciones que ejecutan versiones locales de los sistemas operativos (SO) Windows server y sistemas de base de datos SQL
Server, ya que pueden verse contenidos por la capacidad y las limitaciones del centro de datos físico.
La migración a la nube puede proporcionar eficiencias operativas y de costos. Además, facilita una mayor flexibilidad y escalabilidad, o la capacidad de comandar el crecimiento o la disminución de recursos para satisfacer de manera equitativa las demandas empresariales, sin la preocupación
de la administración de infraestructuras.
La nube pública también ofrece tecnologías de seguridad avanzadas que protegen a las organizaciones frente a un panorama de amenazas en constante cambio. Si bien los beneficios son dignos, el recorrido
hacia la migración puede ser complejo. Cuando está en condiciones de migrar a la nube, es esencial contar con una guía sólida, desde la definición y planificación de la estrategia hasta la gobernanza
y la administración, y cada paso en el medio.
Para llevar a cabo la migración, debe determinar cómo hacer lo siguiente:
- Definir la justificación del negocio y crear
el plan de migración a la nube inicial.
Evaluar su entorno local para entender qué
cargas de trabajo y aplicaciones desea migrar. - Realizar la migración con un impacto limitado
en el negocio. - Gobernar y administrar los recursos
en la nube después de la migración,
aprovechando al máximo su inversión
y manteniéndola segura.
