Si alguna vez trabajaste con equipos remotos, trabajaste desde casa o participaste de una reunión de personal virtual, es probable que hayas visto o incluso participado en pantallas compartidas gratis.
La pantalla compartida suele ser una característica de una herramienta de productividad empresarial y se hace en colaboración con programas como videoconferencias gratuitas o incluso pizarras en línea gratuitas. Sin embargo, cada una de estas herramientas por sí sola no es suficiente para seguirle el ritmo a las exigencias del trabajo remoto actual.
La pantalla compartida gratis es una herramienta versátil que permite que una persona comparta la pantalla de su computadora con otros usuarios en tiempo real para que todos quienes participan de una reunión puedan ver lo mismo al mismo tiempo, quitando así la necesidad de enviar por correo electrónico contenido pertinente como documentos o imágenes. Ha simplificado la colaboración virtual en tiempo real y ha ayudado a que las reuniones sigan siendo productivas y exitosas.
Compartir pantalla gratis es fácil, pero hay formas correctas e incorrectas de hacerlo, así es que vamos a asegurarnos de que estés aprovechando al máximo la pantalla compartida gratis.
Cuerpo
El tiempo es un recurso finito y la pantalla compartida te puede ayudar a pasar menos tiempo explicando ideas durante una reunión. Tiene muchos usos, como la capacitación y el soporte en línea, demostraciones para clientes potenciales, revisión de documentos, etc. Los mejores programas te darán opciones para que, por ejemplo, puedas compartir ventanas específicas o todo el escritorio durante una reunión.
Ya sea que tengas que compartir ideas o revelar rápidamente información y datos, la pantalla compartida resulta ideal. Ahora ya es una práctica común en el mundo de los negocios, porque permite la colaboración en tiempo real y mantiene el flujo de las reuniones sin los obstáculos que implica enviar contenido por correo electrónico.
Como la mayoría de las personas aprende de manera visual, es más probable que tu público comprenda e incluso retenga la información que compartes si puede verla. Estos son algunos consejos para que te asegures de que estás aprovechando al máximo la pantalla compartida gratis:
Conoce el software
Es probable que tengas acceso a varios programas gratuitos para compartir pantalla, por lo que resulta imprescindible que conozcas los controles del que vas a utilizar. Si bien la mayoría son similares, tienen distintas interfaces de usuario y controles. Asegúrate de aprender a usar el software y las aptitudes de visualización necesarias. La pantalla compartida gratis no es una presentación de diapositivas tradicional, sino más bien una forma de presentación, por lo que es esencial que te sientas cómodo con la tecnología.
Configura tus herramientas de comunicación para “no molestar”
Recibir notificaciones en medio de la sesión de pantalla compartida gratis puede frenar el ritmo de la reunión, distraerte e, incluso, puede llegar a ponerte en vergüenza. Si configuras las herramientas de comunicación para que no te molesten, puedes asegurarte de que no aparecerán mensajes no deseados en pantalla en medio de la presentación.
Limpia el escritorio o comparte una ventana
Al igual que lo que pasa en casa, cuando invitas a alguien, no quieres que lo primero que vea sea tu escritorio repleto y desordenado. Si el escritorio está desordenado, es probable que te cueste encontrar los archivos que tienes que compartir y también puede distraer a los presentes, con lo que darás una impresión poco profesional y desorganizada. Puedes compartir una ventana en lugar de todo el escritorio si no tienes tiempo para limpiarlo.
Cierra todos los programas y las aplicaciones que no necesites
Cerrar las aplicaciones innecesarias resulta especialmente importante porque no quieres compartir información personal, como tu cuenta bancaria o cualquier información confidencial de la empresa o de algún cliente. Sé proactivo y prepárate antes de la reunión. Pregúntate si es necesario que compartas toda la pantalla o si puedes simplemente compartir una ventana específica. Con una limpieza rápida, podrás estar seguro de que en pantalla no aparecerá nada que te sorprenda ni a ti ni a los asistentes.
Preocúpate de la seguridad
Con ciberataques cada más o menos 39 segundos, es más importante que nunca que te preocupes tanto por tu seguridad, como por la de los presentes. Elige una herramienta de pantalla compartida gratis que esté completamente integrada y que sea fácil de configurar, además de segura.
La pantalla compartida es gratis y tiene muchos beneficios, como la interacción con trabajadores y equipos remotos a la vez que se fomenta la colaboración. Es útil y sencilla, pero es fundamental que te asegures de estar usándola bien. Estás abriendo tu mundo, a menudo privado, a otras personas y no estar preparado implica que pueden ocurrir eventos algo vergonzosos y hasta catastróficos. Si te preparas, evitarás que tanto tú como los asistentes tengan una mala experiencia.
